Quiénes somos

Desde mayo de 2015 empieza su actividad como voluntaria independiente de ayuda a los refugiados. En abril de 2016 viaja a Atenas para trabajar en campo de refugiados de Skaramagas. Habiendo recaudado en España 8.000 euros que se gastan comprando comida, medicinas y 1.000 barreños para el campo de refugiados. En mayo de 2016, crea la Asociación Himaya ( Proteger en árabe) que se encarga de apadrinar pisos en Grecia para sacar familias desfavorecidas de los campos de refugiados. Un mes más tarde conoce a Angie Carabassa y Sonia Bocharan y forman el equipo directivo actual de Himaya.

Durante toda su vida ha formado parte del tejido asociativo del barrio de les Corts, en Barcelona, formando parte de diferentes asociaciones de carácter cultural, informativo y reivindicativo. Su primer acercamiento al voluntariado llega con la tragedia de los refugiados en Grecia. Cansada de ver el desastre humanitario de los que intentan llegar a Europa provenientes de zonas en conflicto y la inacción de los gobiernos, decide dar un paso al frente y va de voluntaria a Idomeni durante 15 días. Allí descubre una forma de vivir totalmente diferente, y constata que hay muchísimo que se puede hacer por las personas refugiadas. A su vuelta, conoce a Rosa y la iniciativa Himaya y se implica totalmente haciendo suyo el proyecto. Actualmente se ocupa de la coordinación de voluntarios, comunicación y redes sociales.

Durante mi vida siempre he ayudado en pequeñas causas solidarias, intentando hacer feliz sobre todo a los niños. Pero en 2015 todo cambió a raíz de ver la foto del pequeño Aylan en las costas de Turquía, tuve la necesidad irrefrenable de ayudar a toda esa gente que estaba huyendo de la guerra y del terror. Gracias a Barcelona Acció Solidària empecé a ayudar con otros voluntarios en la campaña de recogida de ropa y mantas para la oleada de refugiados que estaba llegando a Europa. Se consiguió enviar varios trailers a Eslovenia, Calais y Grecia. Conocí a gente genial que llevaba muchos años trabajando en muchas causas sociales y a una persona super especial que acababa de llegar de Londres, junto a ella y 2 buenas amigas creamos un grupo de teaming llamado Humans Helping Humans, cada mes lo recaudado se destina a asociaciones y ong’s independientes con el mismo propósito de ayuda a refugiados. Cuando se cierran las fronteras y miles de refugiados se quedan varados en Grecia, abro mi cuenta de facebook para poder seguir de cerca todo lo que estaba pasando y empiezo a conocer a voluntarios independientes que estaban sobre el terreno o voluntarios que estaban a punto de ir a Idomeni, el gran campo de refugiados que se creó junto a la frontera de Macedonia. En ese momento conozco a Angie Carabassa. A la vuelta de su viaje a Idomeni nos conocemos. Después de publicar un post en facebook María Rosa se cruza en su camino y le habla de Himaya por primera vez… Y por una carambola del destino, aquí estoy junto a estas 2 mujeres increíbles, luchando día a día por mantener vivas las ilusiones de gente que lo ha perdido todo y lo único que quieren es vivir en paz y un futuro para sus hijos.